Cuando era niña siempre quise imitar el ejemplo de mi madre. Me ponía su ropa y sus zapatos creyendo que de esa manera me vería igual a ella. Hoy que han pasado los años me doy cuenta, cada vez que me miro al espejo, que soy igual a ella. Veo su rostro en el reflejo y creo estar viéndola a ella. Que importante es que desde niño se enseñe en los hogares el amor, los valores, el respeto, y que esos niños cuando nos ven quieran imitarnos. Dedicado a mi madre.
EL EJEMPLO DE MI MADRE
(Arjona Delia)
Desde niña pude ver
el sacrificio que hacía,
trabajaba día a día
porque era una gran mujer.
Ella me supo envolver
con sus besos tiernamente,
con su consejo prudente,
fortaleciendo los lazos,
sosteniendo con sus brazos
a mi espíritu inocente.
Desde niña me cuidaba
enseñándome valores,
corrigiendo mis errores
y de noche me arropaba.
Sabiamente siempre hablaba,
brindó buena educación,
porque su más grande don
fue su afecto sin medida,
y no solo me dio vida,
me entregó su corazón.
Desde niña vi el valor
de imitar todo su ejemplo,
en el espejo contemplo
hoy su rostro y su interior.
Recordarla es el motor,
fue mi madre muy querida,
fue muy triste su partida
y nunca será olvidada,
¡es la joya más preciada
que resguardo en esta vida!
Poema publicado en el libro "Identidad" de Arjona Delia
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Copyright ©13/09/2019 by Arjona Delia
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